Si bien desde hace décadas las mujeres fuimos logrando cambios que nos posicionan positivamente en relación con nuestras pares de generaciones anteriores, relacionados con los roles que ocupamos en lo público y lo privado, definidos históricamente desde las desigualdades de género, hay todavía cambios sustanciales que necesitamos seguir trabajando.

La intención que nos anima es crear espacios donde poder compartir experiencias, reflexionar y construir colectivamente aprendizajes significativos que nos faciliten tomar conciencia de nuestra situación actual y nos permitan imaginar relaciones y prácticas transformadoras que surjan desde nosotras y puedan expandirse…

Integrantes de Equipo MuMi

Clr. Mariana L. Rezk, Clr. Susana Cypin, Clr. Paola Gentile, Clr. Cristina Zóccola

17/10/13

Boletina Nro. 1 "Estereotipos de Género"

Estereotipos de Género
Clr. María Cristina Zóccola

Definición: Son creencias que atribuyen determinadas características a los miembros de un grupo.

Creencias sobre las características de los roles típicos que los hombres y mujeres tienen que desarrollar en una cultura o sociedad.

Los estereotipos de género sirven para definir metas y expectativas para ambos sexos, marcando una evolución diferente para hombres y mujeres justificando, muchas veces, una discriminación hacia estas últimas.

Son ideas fuertemente asumidas sobre las características de varones y mujeres que se traducen en una serie de tareas y actividades que les asigna cada cultura.



De mujeres, roles y máscaras.

Clr. Paola Gentile
Probablemente no sea un mero accidente histórico que el significado de la palabra persona sea máscara, es más bien un reconocimiento al hecho de que siempre cada un@ de nosotr@s representa un rol.

Reflexionaremos sobre este rol en función de nuestro sexo – femenino -ya que desde que nacemos, socialmente se nos va transmitiendo explícita o implícitamente que papeles o roles tenemos que desempeñar, que se espera de nosotras, como debemos actuar y relacionarnos, como y que debemos y podemos sentir,  pensar, hacer…

En este gran teatro  que es el mundo, mujeres y hombres se convierten en actrices y actores y según interpreten mejor o peor ese papel ya asignado, el público – la sociedad – los aplaudirá o censurará. La crítica juzgará cuanto se acerca o aleja cada cual de los estereotipos, definidos como el conjunto de creencias generalizadas en los cuales se atribuyen rasgos, comportamientos y expectativas.

La gran tragedia termina siendo cuando lo esperable y aceptado socialmente para nuestro género, lo introyectamos a nuestra vida como válido y verdadero y así vamos ajustando nuestras experiencias a este “deber ser”, usando la máscara “apropiada” para cada puesta en escena, quizás sin ser conscientes de nuestra elección, de nuestro protagonismo.

Históricamente el director teatral ha sido el patriarcado, que como sistema de organización social, política, económica y religiosa  se basa en la idea de autoridad y liderazgo del varón. Este modelo ha dado como resultado una asimétrica distribución del poder en las relaciones entre los varones y mujeres, desigualdad que desvaloriza lo femenino subordinándolo  a lo masculino ya que en la distribución escénica el espacio se ha divido entre “lo publico” (a la vista de todos) para los varones y “lo privado” (lo familiar, doméstico por lo tanto invisibilizado) para las mujeres.

De lo anterior se desprende que a las mujeres se nos han asignado papeles secundarios y de reparto que como tales no han sido reconocidos ni legitimados, más allá de las limitaciones con las que nos hemos topado para el crecimiento personal. Si bien el avance de las mujeres en el espacio público es notable aun hay mucho por recorrer en el camino de la igualdad.

Por eso hoy, es necesario y urgente que nos detengamos a pensar, a cuestionar los mandatos sociales y contactar en cómo estamos llevando adelante la función de nuestras vidas  para que cuando se escuche la voz que nos diga: luz, cámara, acción!! Sea la voz de nuestro  interior.

Para finalizar cito a Carl Rogers quien nos expresa en referencia a las afirmaciones de una clienta en su proceso de llegar a ser, tras descubrirse en su propia experiencia:

“Ser ella misma implica descubrir la unidad y armonía existentes en sus verdaderos sentimientos y reacciones, y no tratar de imponer una máscara a su experiencia o imprimirle una forma o estructura que distorsione su verdadero significado”





 “Estereotipos de Género y Medios de Comunicación” 
Clr. Susana Cypin

¿Cuáles son los modelos de Mujeres y Hombres que promueven los medios?
Todxs conocemos la influencia y la importancia en nuestras vidas de los medios de comunicación, sobre todo en ésta época donde también podemos ser co-creadorxs de la información. Debemos reconocer que sus mensajes influyen y legitiman comportamientos.




A  mediados de siglo pasado, y con mayor fuerza a partir de los años 70 se incorporan los estudios sobre las mujeres al mundo académico.
Junto con otros aspectos, se empieza a tener en cuenta también el estudio de los medios de comunicación, de los cuales surge el análisis de la imagen que la sociedad construye sobre las mujeres y como se representa en los medios.

Teniendo en cuenta la enorme influencia de estos en la socialización de las personas y en la construcción de sus subjetividades, resulta urgente una revisión crítica sobre los contenidos que públicamente nos incluyen tanto en medios gráficos como en programas de televisión, o en mensajes publicitarios con imágenes y comportamientos estereotipados.

Los estereotipos nos brindan una imagen simplificada y muchas veces distorsionada, acerca de cómo somos las personas, que se reflejan en roles asignados y comportamientos que se repiten en la vida cotidiana.

En nuestra sociedad, los estereotipos de género se reafirman sustentados en los principios del sistema patriarcal, afectando negativamente a ambos géneros, ya que limitan e impiden el descubrimiento, desarrollo y expresión plena de cualidades y valores propios del ser humano, sin distinción de sexo.

Aunque contamos con nutrida legislación que reivindica y defiende los derechos de las mujeres, a vivir libres de violencia y discriminación, resulta arduo que puedan ponerse en práctica. Existen distintos organismos que han creado observatorios de equidad de género, de violencia de género o de comunicación y género, que se dedican a denunciar la violación e incumplimiento de derechos, además de realizar tareas de apoyo e investigación promoviendo la igualdad entre los géneros.

Solamente mirando televisión, encontraremos innumerables ejemplos del lugar que ocupan las mujeres. En noticieros o programas de actualidad generalmente son auxiliares de un hombre, o presentan un segmento en particular (modas, espectáculos, pronóstico del tiempo), ó alguna modelo semi-vestida, acompañando al cómico de turno como objeto de adorno, la pobre y sufrida que espera a su amado en las novelas. Ni que hablar de las publicidades, siempre mujeres presentando productos de limpieza o cocina. Mientras ellos, existosos dejan un tendal de enamoradas al ponerse tal o cual perfume y suben triunfantes a un auto de último modelo.

Estos recurrentes mensajes e imágenes que estereotipan y discriminan, contribuyen a reforzar y reproducir relaciones desiguales entre géneros, ubicando a las mujeres en el lugar de objetos, y constituyen lo que se denomina violencia mediática o simbólica. 

Aunque en los últimos años se han ido incorporando, lentamente algunos cambios, es necesario poder reflexionar y desarrollar una mirada crítica que nos libere de comportamientos y modos impuestos.

Bibliografía:
- -     Suarez, Juan Carlos. 2007, “Medios de comunicación y diferencia de género” en: 
      http://www.mujeresenred.net/IMG/pdf/estereotipos.pdf  acceso de 27-09-2013
-     Chaher, Sandra – Santoro, Sonia. (comps.) 2007 “Las palabras tienen sexo: introducción a un periodismo con perspectiva de género” - 1a ed. – (Buenos Aires : Artemisa Comunicación Ediciones)
 -    Alejandra Iglesias y Mónica Córdoba. 2013. “Violencia mediática – Violencia invisible” en   http://lausinadelasmadres.blogspot.com.ar/2012/09/violencia-mediatica-violencia-invisible.html                             
      acceso de 27-09-2013



                                                                                Ayer y Hoy 























































Un juego que no es juego: El “Test de Bechdel”


Clr. Mariana L. Rezk











“La Regla”


Desde 1983 Alison Bechdel  publicaba una historieta llamada “Dykes to watch out for”. En el año 1985 en un capítulo que tituló “The Rule” (“La Regla”)  uno de los personajes femeninos de la tira enunciaba 3 reglas que podían aplicarse al mirar una película. Las reglas eran las siguientes:

1. Debe tener al menos dos personajes femeninos con nombre;

2. Estos personajes deben hablar entre sí;

3. Sus conversaciones deben girar sobre otros temas aparte de sobre los personajes masculinos.

Estas tres sencillas, y hasta ingenuas reglas, se transformaron en lo que se conoce como “Test de Bechdel” o como “Test de Bechdel  - Wallace”, ya que Alison Bechdel  atribuye la inspiración de las reglas a su amiga Liz Wallace.

Rápidamente se popularizó para analizar y pensar si, en principio una película, pero puede aplicarse a cualquier pieza audiovisual, o también literaria, representa adecuadamente a las mujeres. Es decir, si presenta y representa a mujeres reales o reproduce los estereotipos que circulan en las sociedades.  No es un test para dictaminar si una película es feminista o machista, como tampoco para juzgar su calidad estética o artística, es simplemente un ejercicio para pensar críticamente cómo se personifican en esos productos culturales a más de la mitad de la población…

Lo usamos?

Las nominadas son….

Anita Sarkeesian,  comunicadora, crítica de medios y creadora del portal Feminist Frequency,  realizó un corto muy corto, ya que dura apenas dos minutos, en donde presenta el resultado del Test aplicado a un gran número de películas. La gran mayoría de las películas que se distribuyen y consumimos, no pasan las tres consignas del test!

Mirando el panorama con buena voluntad y benevolencia podemos suponer que lxs realizadorexs,  lxs directorxs, y distribuidorxs, no son muy conscientes de este sesgo de genero… pero será así?  


Somos adultas y adultos, tenemos criterio propio y podemos reflexionar acerca de lo que vemos, escuchamos, leemos… pero y si aplicamos el Test de Bechdel a los dibujos animados y la literatura infantil y juvenil?


A jugar se ha dicho! Pero en serio…


Las reglas se han ido modificando y ajustando con el paso del tiempo, pero no dejan de ser sencillas y las podemos tener presentas cuando disfrutamos de películas, programas de televisión y literatura, y sobre todo cuando proponemos, ofrecemos o invitamos a nuestras hijas e hijos, o nietxs, sobrinxs, alumnxs a que compartan con nosotrxs nuestra cultura…patriarcal.



1. Aparecen como mínimo dos mujeres con nombre propio  (es decir, que no se identifiquen como “chica Nº 1” y “chica Nº 2” en  listado de personajes al final de la película).

2. Esas mujeres hablan entre ellas (es decir, una dice algo y otra responde. Una frase sin respuesta no es una conversación. Además el dialogo tiene que durar al menos de 60 segundos).

3. Hablan entre ellas de algo que no sea un hombre. Sin más restricción: que el tema de conversación no sea un hombre, no importa el rol, función,  parentesco, etc. Es igual que sea hijo, pareja, jefe, padre, amante, o quien sea.


Links:
http://dykestowatchoutfor.com/about (página oficial de Alison Bechdel). Visitada 02/10/2013.

http://bechdeltest.com (página donde se encuentra una nómina de películas y como pasan o no el test. No es una página oficial ni de Bechdel ni de Sarkeesian. Cualquier persona puede cargar información y se actualiza constantemente). Visitada 02/10/2013.

http://www.youtube.com/watch?v=bLF6sAAMb4s (video de Anita Sarkeesian  donde explica las reglas y muestra ejemplos de películas que no las pasan). Visitada 02/10/2013.

http://unadocenade.com/una-docena-de-peliculas-que-pasan-el-bechdel-test/ (página que lista doce películas que si pasan el test). Visitada 02/10/2013.

http://cinemania.es/noticias-de-cine/las-nominadas-a-los-oscar-2013-y-el-test-bechdel  (página que analiza las nominaciones del 2013 y el test). Visitada 02/10/2013.





MODELOS PARA DESARMAR

Clr María Silvina Munné



Alguna vez escuchaste que “las mujeres” son dependientes?, débiles? sentimentales?, frágiles?, volubles?, tímidas?, hogareñas?, pasivas?, poco inteligentes?, subjetivas?, sobreprotectoras?, pacientes?,cuidadoras? cooperativas?, amorosas?,tiernas? sacrificadas?

Y que “los hombres” son proveedores?, independientes?, fuertes?, racionales?, protectores?, aventureros? activos?, ambiciosos? objetivos?
impetuosos? líderes? competitivos?
Los estereotipos son generalizaciones sobre características de un grupo social sobre las que hay un acuerdo básico. Tendrían un valor funcional y
adaptativo, porque permiten comprender el mundo de manera simplificada, ordenada, coherente, e incluso proveerían datos para una determinada
posibilidad de predicción de acontecimientos futuros, economizando esfuerzos analíticos, tiempo y preocupaciones para enfrentarnos a un medio social siempre desconocido, cambiante, desordenado y caótico en el que queremos adaptarnos y sentirnos seguros. Los estereotipos tienen una función muy importante para la socialización del individuo ya que  facilitan la identidad social, al aceptar e identificarse con los estereotipos dominantes en dicho grupo se siente integrado en él.
Pero también la relación entre los conceptos «estereotipo», «prejuicio» y «discriminación» es muy estrecha.
Al  referirnos a “estereotipos de género”  consideramos que  los sistemas de género comprenden  al conjunto de prácticas, símbolos, representaciones, normas y valores sociales que las sociedades elaboran a partir de la diferencia sexual anatómico-fisiológica y que dan sentido a las relaciones entre personas sexuadas.
Los estereotipos  de género son rígidos, dicotómicos, excluyentes, desiguales y jerarquizados y  condicionan a las personas y limitan las potencialidades humanas  al estimular o reprimir los comportamientos en función de su adecuación al género creando no solo barreras externas sino también internas.
Los estereotipos son transmitidos en el proceso de socialización: primaria, a través de los modelos familiares (lo que niñas y niños viven, observan, escuchan, nombran), luego es continuada por la escuela y reforzada permanentemente por los medios de comunicación.
Un ejemplo interesante es la investigación del Dr. Walter Mischel, de la Universidad de Standford, California llevada a cabo un hospital. Se trataba de que grupos de estudiantes, profesionales y otras personas (electricistas, secretarias, choferes, etc.) pasaran un rato observando a los bebés recién nacidos y apuntaran sus observaciones. Durante más de seis meses participaron todo tipo de personas, de distintas formaciones, niveles socioeconómicos y pertenencias culturales. Las enfermeras tenían la consigna de, cuando iba a llegar un grupo observador, ponerles mantitas rosas a los varones y celeste a las niñas. Los resultados de la observación fueron los esperados. Los observadores se dejaron influir por el color de las  mantitas y escribieron en sus reportes: "es una niña muy dulce" o  "es un muchachito muy dinámico”. El género asignado a los bebés solo por el color de la manta fue lo que condicionó la respuesta de las personas.
La “perspectiva de género” ha permitido reconocer, visibilizar, des“naturalizar”  los estereotipos que determinan relaciones asimétricas, de poder entre los géneros, que han sido constituidas social e históricamente y son constitutivas de las personas; que atraviesan todo el entramado social y se articulan con otras relaciones sociales, como las de clase, etnia, edad, preferencia sexual y religión.
La perspectiva de género y de “géneros” (femenino, masculino, trans, queer y más allá…) favorece el ejercicio de una mirada crítica y cuestionadora de la realidad para reconocer, expresar, comunicar, denunciar, transformar la situación de las personas, de la opresión a la libertad, del condicionamiento al desarrollo y despliegue.  Nos permite ir creando nuevas construcciones de sentido, para que todas las personas se relacionen a través de vínculos no jerarquizados ni discriminatorios. Aportando así nuevas perspectivas a viejos problemas, los actualizará, resignificará, hará visibles a todxs por ser sujetos con historia dentro de una historia más amplia y total que contiene y comprende a la experiencia humana.

Bibliografía:

Bellucci, Mabel 1992 “De los estudios de la mujer a los estudios de género: han recorrido un largo camino” en Fernández A. M. (comp.) Las mujeres en la imaginación colectiva (Buenos Aires: Paidós).

Gamba, Susana 2011 ”Estudios de género/ perspectiva de género” en Investigaciones y Publicaciones del Observatorio de Equidad de Género, Dirección de la Mujer del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (Buenos Aires).

González Gabaldón, Blanca 1999 “Los estereotipos como factor de socialización en el género”  en Comunicar (Sevilla) N°12.

Lamas, Marta ” La perspectiva de género”  en Educación y Cultura  (Jalisco, Sección 47 , Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación)





https://a.gfx.ms/i_safe.gif
https://a.gfx.ms/i_safe.gif

Caramelos Surtidos: Datos para compartir:



·                         Link con mucha información y teléfonos para tener en cuenta:  http://www.jus.gob.ar/atencion-al-ciudadano/guia-de-derivaciones/violencia-familiar.aspx
·                         Portal actualmente inactivo, pero con valiosa información, como por ejemplo este libro para descargar:  http://www.artemisanoticias.com.ar/images/las-palabras-tienen-sexo.pdf
·                         Blog con biografías de mujeres…permanentemente actualizado:  http://mujeresquehacenlahistoria.blogspot.com.ar/
·                         Recomendaciones del Observatorio de la Discriminación en Radio y Televisión:
Fueron realizadas con el objeto de procurar una comunicación inclusiva y que no reproduzca estereotipos que fomenten la discriminación y la estigmatización de distintos colectivos sociales. Se trata de pautas generales y específicas sencillas pensadas para que a través de su aplicación cambien contenidos discursivos que circulan en los medios en forma naturalizada, legitimando de modo voluntario o involuntario, desigualdades hacia ciertos grupos:
   
·                         Página personal de Diana Maffía. con escritos impecables y noticias actualizadas: http://dianamaffia.com.ar/
·                         Librería de Mujeres especializada con material siempre actualizado y libros difíciles de conseguir y tienen un      
              interesante Club de lectoras:  http://www.libreriademujeres.com.ar/

·                         Libro para acercarse al tema género, sacarnos dudas y compartir con hijxs y alumnxs: 
                             Castillo, Irene. Manual de género para niñas, niños y adolescente: mayores de 12 años. Buenos Aires: Centro Cultural de            
                  España en Buenos Aires. Grupo de estudios Sociales, 2010.




No hay comentarios:

Publicar un comentario